Dirección obligatoria
Antonio Martínez Sarrión
(Albacete, 1939)
Ahora que voy creciendo,
y el cauterio
disminuyó su paroxismo y un dorado silencio
preñado de inminencias aventó el griterío.
Ahora, ya borrada la sangre que el tornado
dejó por los cegados corredores,
acuciante y en vilo
porque aún escoltado por el miedo,
abro los ojos a la cercanía
de tu sonrisa cómplice, y campanas
de nuevo rescatadas y vencejos
ebrios de tarde, arden
con una sola flecha indicadora
que reiteran los cruces innúmeros del mundo
y a tu cuerpo conduce,
ese pequeño y abrigado puerto
donde arribo sediento, pero en paz.
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